Los neumáticos son unos de los grandes olvidados en el mantenimiento de nuestros autos. A veces por el tiempo que puede llevar el trasladarnos a un taller mecánico o estación de servicio, otras por desconocimiento o incluso por querer ahorrar en su cuidado.
El caso es que muchos neumáticos pasan más tiempo de lo pensando en nuestros vehículos, muchas veces en condiciones que pueden poner en riesgo nuestra seguridad.
Las llantas de un auto son piezas fundamentales para su funcionamiento, proporcionan seguridad y estabilidad al momento de conducir y un desperfecto en alguna de ellas podría provocar serios accidentes, sobre todo a altas velocidades.
Los neumáticos son piezas fundamentales en tu automóvil, por lo tanto, te compartimos algunos consejos que contribuirán a que los puedas mantener en buen estado durante mucho tiempo.
Comprueba la presión de tus llantas una vez al mes: Los neumáticos pueden perder aproximadamente una libra por pulgada cuadrada de aire (PSI) al mes; en climas fríos pueden perder incluso más. Los neumáticos poco inflados disminuyen la maniobrabilidad del vehículo y el rendimiento de la gasolina, también pueden provocar un desgaste prematuro de la banda de rodadura y un reventón de consideración.
Los neumáticos son caros, pero comprobando la presión de estos con regularidad puedes alargar su vida. Para conocer la presión de las llantas puedes emplear un manómetro, el cuál es muy accesible en tamaño y costo.
Inspecciona los neumáticos con regularidad, especialmente antes de los viajes largos por carretera. Al momento de comprobar la presión de los neumáticos o de lavar tu vehículo, realiza una inspección física de los mismos.
Entre las cosas que debes buscar están las grietas, los bultos y los objetos que puedan haber perforado el neumático, tales como clavos, tornillos, cristales o piedras. Si uno de estos objetos perfora el flanco del neumático, éste deberá ser sustituido.
No sobrecargues tu vehículo. En la placa que se encuentra en el marco de la puerta hay información sobre la cantidad de peso que tu vehículo puede soportar con seguridad. La sobrecarga de un vehículo también puede provocar el fallo de los neumáticos.
No esperes a que tus llantas estén destruidas para reemplazarlas. Los neumáticos son caros y no son especialmente divertidos de comprar; conducir con llantas que ya hayan sobrepasado su vida útil te pone a ti y a tu familia en peligro.
La mayoría de los neumáticos tienen una barra de desgaste entre las bandas de rodadura. Si la profundidad del dibujo del neumático está en la barra o por debajo de ella, es hora de cambiarlos.
Fuente: Total Energies
Roberto Chiribelo
